Gallego: "Esto tengo que cortarlo de raíz"

El técnico de Independiente dijo que los jugadores no hicieron nada de los que les pidió. Además, aseguró que para el próximo partido hará muchos cambios y probará con juveniles. Montenegro, por su parte, se enojó con el juez Laverni.


"Esto no da para más. Los que jugaron hoy tenían su posibilidad, voy a poner a varios pibes. Mantuve la línea de Pepé (Santoro) y no me contestaron con la misma moneda", fueron las palabras cargadas de furia y enojo que salieron de la boca de Américo Rubén Gallego luego de la goleada recibida ante Lanús.

Además, anunció cambios contra Huracán, la próxima fecha: "Tengo que estar tranquilo para tomar decisiones. Sé que un partido no es mucho para algunos, pero ya viendo esto tengo que cortarlo de raíz de entrada porque sino, otro técnico más conmigo no va. Tengo que hacer cambios."

Con vehemencia, el entrenador volvió a atacar: "Hay que llegarles con algo a estos jugadores. Pasaron muchos entrenadores... si me contrataron a mí es por algo. Nunca pensé que... iba a decir una palabra, pero... A veces les da lo mismo ganar que perder. Esta noche ya no duermo, después veremos. En el vestuario los encontré tranquilos, y yo me estoy muriendo por dentro."

Además, el Tolo no dejará descansar a nadie y hoy el Rojo volverá a verse las caras en Villa Domínico, donde seguramente deberá escuchar los reproches del técnico.


Montenegro, furioso con Laverni
El capitán de Independiente fue otro de los que habló al término del encuentro y mostró un gran enojo con el árbitro del partido, Saúl Laverni. En el vestuario los encontré tranquilos. Yo me estoy muriendo por dentro.

"Un árbitro de Primera no puede cometer esos errores", dijo el Rolfi, quien agregó: "En el primer tiempo es muy claro, un árbitro de Primera que se cruza delante de una pelota en un tiro libre nunca lo vi en mi vida. Y después de la manera que pasa en el segundo gol también, porque si vos estás pidiendo distancia, estás dado vuelta y la juegan, lo mínimo que tenés que hacer es volver para atrás, nadie te va a decir nada... Ellos pidieron distancia, él me acompaña a mi para atrás. Después me dijo 'disculpenme, déjenme dos minutos que entré en una laguna', y nosotros qué hacemos, nos vamos con cinco goles a casa. Esto no es joda, nadie viene a golpearnos la puerta a pedirnos perdón. En dos minutos se te va el partido contra el puntero, nosotros nos jugamos mucho."